ESTUDIANDO AYER Y HOY

 

Sabía lo esencial, lo esencial pero muy bien aprendido. Y al pasar de curso a curso, todo parecía nuevo, fascinante y bastante incomprensible. No, no eres más torpe que antes, estudiando. Crees que estudias cosas nuevas o diferentes, pero no. Casi todo es lo mismo, con otro tipo de lenguaje o simbología diferente. Lo que ha cambiado es el punto de vista. Ya no estudias resultados, sino desarrollos y demostraciones genéricas sin datos. No hay realización numérica. Hay obtención de fórmulas que de forma más específica abarca situaciones generales y específicas. De alguna forma se podría hacer un algoritmo, ya casi preparado para computación, o programación informática.

Intentas ajustarte al lenguaje adoptado cada año en ese curso, pero lo que hoy es A ayer fue B. Cuando todo se cuenta sin pedagogía ni orden, todo como un sinsentido, es difícil comprender.

Así pues, conceptos como centro de masas y momentos de fuerza y de inercia son difíciles de entender.

Los primeros estudios estaban referidos al centro de masas, pero nunca nos los dijeron. Así cuando aparece el concepto no se sabe de que hablan.

Aparece el concepto de momento de fuerza, cuando siempre lo llamaron trabajo. Definieron el trabajo teniendo en cuenta un único punto de vista, y cuando aparecen nuevos casos la fórmula que se aprendió no sirve. Y entonces algo que diste de pasada al final de un curso de hace diez años, -nunca utilizado- lo tomaron como esencial.

"La física no se aprende de memoria, hay que razonar" ¡Que frase tan desafortunada!. 

Las leyes físicas atienden a las realidades por experiencia, no a los razonamientos humanos.

Estudiaste lo llamado par de fuerzas, pero luego se habla de "torques". No entiendo la insistencia de utilizar esta palabra.

Con un par de libros, uno claramente insuficiente, con algunos conceptos y ejemplos muy sencillos que no abarcaban el contenido del curso y otro muy complicado que el profesor dice que está mal. Quedan unos apuntes sin pedagogía, resueltos sin explicación alguna. Esto sumado a algún despropósito, por ejemplo utilizar integrales antes de estudiarlas en matemáticas. 

Y pasado un año, por fin la consulta de un libro y fotocopias eficaces, se agradece en el alma.

De este modo, las ganas de estudiar... esto es ir arrastrando de mala gana la asignatura, mientras hubiera otras materias a estudiar, esto queda relegado, no hay tiempo solo lo justito. 

Y después de un primer triunfo, llega el consabido "si no quieres caldo: dos tazas llenas". Bueno en la vida también nos sucede esto, en otros ámbitos.

Pero después de caer, hundirse, levantar, y caer, incluso renunciar, al igual que en otras profesiones, difícil es abandonar del todo, ¡A persistencia no nos gana nadie!. ¡Haciendo siempre lo mismo, no se consiguen resultados diferentes!.

Pasa el tiempo, años más tarde siguiendo un consejo, compré unos libros, que a pesar de utilizar -para no variar- otro tipo de lenguaje (siendo en castellano también) , otras referencias y puntos de vista, poco a poco logra entender y aprender, y encontrar cuales eran esos conocimientos que le faltaban para la comprensión.

¿Por qué no consultó otros libros?, Sí, los consultó, pero cada uno utiliza un lenguaje diferente, me refiero a simbología, también consultó libros en inglés, y estos no resolvían sus dudas.

Ya cansada de no comprender explicaciones, fue a clases privadas con pocos alumnos. Y acude a internet, buscar hasta encontrar, al buscar la palabra "torque" aparecen reseñas médicas de testículos retorcidos, pero sabe lo que busca y eso no es, concepto de torque en asignatura de física, y así insistiendo al final aparecieron unos vídeos del profesor "Walter Lewin" explicados en inglés. Con mucha paciencia, intuye y después traduce las explicaciones que nunca escuchó en castellano, o que al menos no captó en su momento.

Gracias que el vídeo se puede pausar y repetir cuantas veces se requiera. De tanto verlos, y repetir alguno de ellos, en algún momento apareció en pantalla, una especie de llamada de atención.

Ahora (año 2020) la búsqueda es más fácil y directa, incluso con subtítulos en castellano. Hoy día hay varias apps para consultar o resolver problemas tanto de física como de matemáticas o química. Pero no hay que olvidar que en la universidad, ya apenas se opera con cifras, no se trata de cálculos con números únicamente. Aunque se estudian temas aparentemente vistos anteriormente, a veces se abordan desde la perspectiva tridimensional.

Analizando más profundamente, es evidente que lo esencial, no abarca todo, y por supuesto que los detalles cambian la manera de abordar los problemas. 

Puede ser común, que parezca que ya se conocen los temas, como que de repente no sabes nada.

"Solo se, que no se nada"   -Sócrates-.